Por P. Domingo Vásquez Morales
Con esta frase de san Juan XXIII quiero comenzar esta reflexión sobre la familia.
Estamos en noviembre y noviembre es el mes de la familia, en La República Dominica, desde el año 1971, mediante el decreto 1516 del Poder Ejecutivo, solicitud hecha por el Movimiento Familiar Cristiano. Cuya finalidad es: “Realizar campañas para su formación integral, siendo esta la célula principal de la sociedad, para que estas puedan ser formadoras de personas, educadoras en la fe y promotoras del desarrollo integral de todos sus miembros”.
La familia, según la Declaración Universal de los Derechos Humanos, es el elemento natural y fundamental de la sociedad y tiene derecho a la protección de la sociedad y del Estado. Los lazos principales que definen una familia son de dos tipos: vínculos de afinidad derivados del establecimiento de un vínculo reconocido socialmente, como el matrimonio que, en algunas sociedades, sólo permite la unión entre dos personas mientras que en otras es posible la poligamia, y vínculos de consanguinidad, como la filiación entre padres e hijos o los lazos que se establecen entre los hermanos que descienden de un mismo padre. También puede diferenciarse la familia según el grado de parentesco entre sus miembros (cfr. abogados.com).
La familia siempre ha sido, y es, el principal pilar de la sociedad, Iglesia Doméstica. Es el lugar donde los miembros nacen, se educan y se desarrollan. Debe ser refugio, orgullo y alegría de todos sus miembros.
Por otro lado, El Día Internacional de las Familias se celebra el 15 de mayo de cada año para crear conciencia sobre el papel fundamental de las familias en la educación de los hijos desde la primera infancia, y las oportunidades de aprendizaje permanente que existen para la niñez, la adolescencia y la juventud.
La Iglesia que peregrina en La República Dominicana, durante este mes, estará realizando diversas actividades, en todas las diócesis. Nuestra gran celebración será el domingo 24: UN PASO POR MI FAMILIA.
Quiero invitar a los lectores de quesecuenta.com, para que nos unamos en oración, por la unidad de la familia y para que surjan las vocaciones al matrimonio y para que papá y mamá puedan educar a sus hijos en valores humanos y cristianos.